La “Colección primerizas” es parte del proyecto de dos libros de Cocorocoq Editoras. Estas historias se unen por un importante lazo: la visión de las niñas y mujeres. Cada autora logra canalizar en su propia historia la experiencia de ser niña y mujer en la sociedad latinoamericana.
Compórtense como señoritas y Las niñas traviesas son los dos títulos que componen la Colección primerizas. Ilustrada e impresa en letras color morado, por decisión de la editorial, son dos historias que si bien se describen como ficción, están inspiradas en las historias de mujeres reales.
Karen Luy de Aliaga es la creadora de Compórtense como señoritas. La autora peruana, que ahora reside en Buenos Aires, relata en este libro la realidad de una joven que intenta aceptar su sexualidad en el contexto conservador del Perú de los noventas.
Hitos importantes del libro están inspirados en momentos de discriminación, que bien la autora o sus amigos experimentaron en algún momento de sus vidas por ser homosexuales.
Con un gusto agridulce, observamos a la protagonista de la historia desde que es pequeña hasta que se convierte en adulta. acompañándola tanto en los desencantos como en las bondades del amor entre mujeres.
El relato de Compórtense como señoritas es ideal para el entendimiento y acompañamiento de las personas que pertenecen a la comunidad LGBT+. Ya sean adolescentes o adultas, Karen ofrece un lugar de cobijo que, debido a la censura, ella no pudo experimentar en su viaje para reconocer su identidad.
Por su parte, Marian Lutzky es la autora de Las niñas traviesas. La escritora argentina inspiró el mundo de estas niñas en la ciudad de Valdivia, ubicada al sur de Chile. Explica con cariño que luego de un viaje se enamoró del lugar. Si bien son tres las niñas traviesas protagonistas de este libro, Valdivia es el cuarto.
La historia es una transparente radiografía de las relaciones de amistad entre mujeres, específicamente en la niñez y adolescencia. El amor incondicional y las traiciones cotidianas que suceden en estos vínculos de forma continua y natural.
Crecer junto a Las niñas traviesas es volver a la niñez si ya la experimentaste y aprender de ella si es que la estás atravesando. La autora, con una poética prosa, logra dar valor a actividades que generalmente consideramos mundanas en nuestro día a día.
Mostrar a estas niñas como seres humanos con necesidades e imperfecciones es un acierto para el desarrollo de todas las mujeres que se han criado con la idea de “la mujer perfecta”, inculcada por la conservadora sociedad latinoamericana.
Ambos libros, si bien están escritos desde el punto de vista de mujeres, están intencionados para cualquier tipo de público. Ambas autoras aclaran que no por ser un libro escrito sobre mujeres, por mujeres, significa que esas experiencias deban quedar limitadas a este círculo.
La Colección primerizas es un excelente regalo, sobre todo si conoces a alguien que se pueda identificar con los temas anteriormente mencionados. Sin embargo, Cocorocoq Editoras y Revista Bravas traen una excelente noticia. Sortearemos tres colecciones entre nuestras seguidoras. Si quieres participar solo debes ir a nuestra publicación en el Instagram de @revistabravas.